lunes, 20 de agosto de 2012

Como cuando el viento pega en mi cara, me deja sentir frío. Me despeina. Me acaricia.
Como cuando escucho tu voz tan extraña...tan sorprendente.
Como cuando mis manos se mueven sobre el brazo de una guitarra, apreciándola, expresando.
Como cuando la lluvia cae en esta tierra, y recorre las calles, sumergiendo cientos de personas en una nostalgia profunda.
Como cuando nuestros dedos se entrelazan, se acarician, se dicen "te quiero"
Como cuando sientes el césped sobre tu cuerpo recostado sobre éste, y te relajas tanto que sientes que te hundes en la tierra.
Como cuando sueñas.
Como cuando corres, intentando llegar a lo imposible, aquello que sólo tarda un poco más.
Como cuando me hundo en una mirada que desaparecerá al instante, y procuro muy en el fondo de mi corazón recordarla (como en alguna oportunidad hice con tu sonrisa) para quedármela, guardarla en el ático del alma y recordarla cuando más la necesite.