miércoles, 16 de noviembre de 2011

Y hoy que ya no tienes la fuerza de antes, y te han cansado los farsantes, yo quiero que sepas que al acostarme te necesito como antes, y que me arropes una vez más. Y esto que escribo es para ti, que canto con la garganta hecha pedazos, cada vez que escucho de tus labios que a no sientes ganas de vivir. Y esto que escribo es para ti, con llanto me ha costado terminarlo, al ver que se me alejan tus brazos y ya no puedo hacer nada por tí. Oh, mamá, siempre sabrás que te amaré.
Sabes, que aunque mis tiempos no me lo permitan, y las distancias se agraden cada día, en mi mente y alma siempre estás.