domingo, 29 de mayo de 2011

Tus días sin sol, son mis días de diluvio, de tormenta; mis días completa e infinitamente tristes. Tus días de enojo, de furia, son mis días de tristeza y desesperación. Tus días de alegría, son los días que me llenan de felicidad. Tu días de soledad son los míos. Los días en que me extrañas también son los míos, pero te extraño doblemente. Lo que vives, yo vivo. Porque ahora en la vida estamos juntos, y eso es lo que importa. Lo que te pase, lo que te duela o te lastime, a mi también me va a lastimar. Yo cuido de vos, y sé que vos cuidas de mi. Acordate que siempre la confianza en el amor lo puede todo. Entonces, vivamos juntos el día a día de esta nueva etapa con confianza y mucho, muucho amor.