Haz que tu cuento valga le pena, haz de tus sueños la ilusión, y que se asome la primavera en las calles de tu corazón. Haz que tu ángel nunca se vaya, que cuide al niño que hay en vos, y cuando crezcas nunca lo pierdas porque perderás tu corazón.
[Los buenos sueños tienen buenos finales e increíbles amaneceres.]