miércoles, 8 de septiembre de 2010

Preguntas y Respuestas

Todos en alguna edad o etapa nos tocaron la edad de las preguntas. Preguntábamos sobre la vida, sobre lo que no entendíamos, a veces conseguíamos una respuesta, y a veces no. Pero no son las mismas preguntas que nos podemos llegar a hacer ahora, ahora nos preguntamos de política, de economía, sobre el colegio, que vamos a hacer con tal y cual cosa, nos preguntamos cómo vamos a resolver nuestros problemas, como podemos manejar nuestro dinero, como podemos solucionar o volver con tal amistad.

A veces nos pasa que preguntamos a otra persona, desde cosas importantes, hasta cosas casi sin importancia, pero sin preguntamos, esperamos una respuesta del otro. A todos nos pasa que cuando la otra persona no encuentra una respuesta para nuestra pregunta, no sabemos reaccionar, porque no era lo que esperábamos. Esperábamos un consejo, algo que podamos hacer, decir, esperábamos una muestra de ayuda, una mano, esperábamos simplemente una respuesta, y no siempre la encontramos.

Lo que si estoy segura, es que lo que nunca falta, son las preguntas, que tenemos miles y miles sin contestar.

Raro caso aquel, el que no tiene preguntas, pero si respuestas, a aquella persona nos gustaría recurrir, ¿no? Sería todo lo contrario a los pensamientos de los seres humanos, que gritan, desesperan por una respuesta, ante miles de preguntas.

Pero si, después de tanto buscar, si nadie tiene tu respuesta, el tiempo solo te la da. Asique ante una pregunta sin contestar, la cuestión es esperar, que las respuestas llegan solas, y las preguntas desaparecen.