Y sigo volando arriba, y muchas veces veo cómo se paran algunos sin tener la posibilidad
de continuar, ni alcanzar esos deseos que, años y años gastaron tras ellos.
Un verdadero caos es lo que veo desde arriba. Veo el retrato perfecto del significado de
la palabra “perdición”. Todo gris, todo tan oscuro. Y a la densa multitud poco le importa eso.
Veo olas que se rompen entre sí. Y fuertes tormentas que no cesan y… simplemente,
veo un cuadro, que seguramente ningún pintor lo pudiera pintar, ni ningún pintor se
atrevería a ponerle su firma. Un cuadro difícil de comprender. Un cuadro muy antiguo,
y el cual se guardará intacto muchos siglos más. Veo a mucha gente entre las pinturas
de ese cuadro asfixiándose y ahogándose, buscando la salvación de una vida agonizante.
En esa oscuridad es muy difícil distinguir entre un amigo y un enemigo, entre el bien
y el mal.
En esa oscuridad es fácil perderse y confundirse es lo habitual…